Ama al señor tu Dios de todo corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.
Marcos 12:30
- Dios quiere mi corazón. (mi alma, mente y fuerza).
- A Dios le agrada la adoración que se basa en la verdad de las escrituras, no en mi propia opinión acerca de Dios.
- La adoración que agrada a Dios es profundamente emocional y doctrinal
- La verdadera adoración ocurre cuando mi alma responde a Dios no a una melodía.
- A Dios le agrada la adoración reflexiva.
- Dios quiere que nuestras reuniones de adoración en público también tengan sentido
- A Dios le agrada la adoración práctica no teórica.
- Dios quiere que viva para El
- La adoración es asunto de corazón.
d.14
- Dios es real no importa cómo me sienta.
- La presencia de Dios es demasiado profunda para medirla con emociones.
- Dios quiere que sienta su presencia pero prefiere que confíe el El.
- Confiaré en que Dios cumplirá sus promesas.
- Agradaré a Dios a pesar del dolor, le agradeceré durante una prueba, confiaré en El durante una tentación, aceptaré el sufrimiento y lo amaré aunque parezca distante.
- Recordaré lo que Dios hizo por mí.
- Procuraré serle fiel. No buscaré ídolos.
- Dios debe gobernar mi corazón ya que mis pies andarán por sus caminos. Hebreos 3:15
Porque Dios ha dicho: nunca te dejaré, jamás te abandonaré.
Hebreos 12:5
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